Los tapetes para entrada son un elemento decorativo muy práctico y muy agradable a la vista que normalmente se emplea en pequeños y medianos comercios que buscan destacar de alguna manera frente a su competencia, la cual –por ejemplo- en las calles comerciales es tan abundante que a nadie le sorprende encontrarse con tres o cuatro tiendas que se dedican a lo mismo en la misma calle y separadas por pocos metros de distancia.
Estos tapetes suelen ser una buena forma de decirle al cliente “¡Eh! Estoy aquí, mírame”, ya que cuando los viandantes pasean por la calle normalmente se fijan solamente en los comercios que más les llaman la atención –a no ser que estén buscando un comercio en concreto, y en este caso la decoración sigue siendo igual de importante por lo que se explica en el último párrafo-. Así que siempre que sea posible hay que contar con un bonito tapete personalizado para tratar de sumar una buena imagen al comercio para que así los clientes potenciales se interesen mucho más por los productos o servicios que se ofrezcan en su interior.
Y en cuanto a los clientes recurrentes, los tapetes para entrada y las moquetas también son muy importantes que inconscientemente estos clientes pueden llegar a recordar el nombre del comercio en el que han estado hace un tiempo; de otra forma sería casi imposible que ese cliente se acordara del nombre del comercio, por lo que sería realmente complicado que volviera a visitarlo en el futuro.
